Como un dispositivo importante para garantizar la evacuación segura del personal en una emergencia, la vida útil de luces de emergencia de mamparo suele ser limitado. Con el tiempo, la batería, la fuente de luz y otros componentes internos de la lámpara envejecerán gradualmente, afectando su funcionamiento normal. Para garantizar que el sistema de iluminación de emergencia pueda operar de manera confiable en caso de emergencia, las luces de emergencia de mamparo deben ser reemplazadas y manejadas adecuadamente de manera oportuna después de que expire la vida útil. Las precauciones y los métodos de manejo durante el proceso de reemplazo están directamente relacionados con la seguridad y la responsabilidad ambiental de la instalación.
El primer paso para reemplazar las luces de emergencia de los mamparos es determinar la vida útil de la lámpara. La mayoría de las luces de emergencia de mamparo están diseñadas para tener una vida útil de 3 a 5 años, pero la vida útil específica también depende de la frecuencia de uso de la lámpara, las condiciones ambientales y el mantenimiento. Para las luces de emergencia que usan fuentes de luz LED, su vida útil es relativamente larga, pero el envejecimiento de las baterías y otros componentes eléctricos aún afectará su rendimiento. Por lo tanto, la inspección regular del estado de la lámpara, especialmente el sistema de batería y circuito, es un factor clave para determinar si la lámpara debe ser reemplazada. Una vez que se encuentra que la batería no puede mantener suficiente energía, la luz decae severamente o la lámpara no puede funcionar normalmente en el caso de la falla de energía, la lámpara debe ser reemplazada.
Al reemplazar las luces de emergencia del mamparo, primero asegúrese de que la energía esté desconectada para evitar la descarga eléctrica u otros accidentes de seguridad. Especialmente durante el proceso de reemplazo, las lámparas viejas deben desmontar cuidadosamente para evitar dañar las conexiones eléctricas. Las nuevas lámparas deben instalarse en la misma ubicación y forma que la instalación original para garantizar que cumplan con los requisitos de seguridad e iluminación. Durante la instalación, las lámparas deben verificarse para ver si son firmes y que las conexiones del circuito de las lámparas están en buenas condiciones. Si las nuevas lámparas usan baterías o sistemas de carga, los contactos de batería y las cajas de batería también deben instalarse sin corrosión o daño para garantizar que las baterías se puedan cargar y usar normalmente.
Durante el proceso de reemplazo, al comprar nuevas luces de emergencia de mamparo, los modelos que cumplan con los requisitos deben seleccionarse de acuerdo con el entorno de uso y las regulaciones relevantes. Los diferentes entornos de aplicación (como barcos, aviones, metros, etc.) pueden tener diferentes niveles de protección, resistencia a la temperatura, requisitos de humedad, etc., por lo que las nuevas lámparas deben satisfacer estas necesidades específicas. Además, las nuevas lámparas también deben cumplir con los estándares y certificaciones internacionales relevantes, como SOLAS (Convención Internacional para la Seguridad de la Vida en el Mar), los Estándares IEC, etc., para garantizar que puedan trabajar correctamente en una emergencia.
También hay ciertas regulaciones para la eliminación de luces de emergencia de mamparo vencidas o inválidas. Las lámparas generalmente contienen baterías, fuentes de luz y otros componentes electrónicos, que pueden contener sustancias peligrosas como plomo, cadmio u otros metales pesados, por lo que no pueden descartarse a voluntad. Las lámparas viejas deben manejarse de acuerdo con las regulaciones ambientales locales, y generalmente deben enviarse a estaciones de reciclaje de desechos electrónicos profesionales para el desmontaje y el reciclaje seguros. En algunas áreas, también se pueden proporcionar servicios especiales de reciclaje para garantizar que estas lámparas se eliminen adecuadamente y reduzcan la contaminación ambiental. 3